Assessment and management of anxiety disorders in children and adolescents. Creswell C, Waite P, Cooper PJ. Arch Dis Child. 2014;99:674–678
Los trastornos de ansiedad son la patología psiquiátrica mas frecuente en infancia y adolescencia. El articulo presenta una revisión de la bibliografía actual sobre el diagnóstico y abordaje de dicho trastorno en la infancia. Comprende un amplio grupo de patologías, con una prevalencia global entre el 9 y el 32 %. Presentan comorbilidad con trastornos depresivos y trastornos del comportamiento. Suponen gran impacto en la vida familiar, educación y tiempo de ocio.
La entrevista estructurada permitirá evaluar la presencia de criterios clínicos diagnósticos, además del grado de afectación. El escala diagnóstica más usada es la Anxiety Disorders Interview Schedule for children and parents (ADIS-C/P). Los tratamientos (terapias cognitivo-conductuales) se clasifican en de baja y alta intensidad. Los de baja intensidad estarían sujetos a evaluaciones sistemáticas y podrían ser de dos tipos. El primero, en el cual los padres son guiados por libros que instruyen en como ayudar a sus hijos a sobreponerse a la ansiedad (biblioterapia). Describen una eficacia del 25-50%, con mejores resultados a largo plazo. Estas tasas son mucho mayores en algunos estudios con la asociación de un psicoterapeuta. El segundo tipo, en el cual esta ayuda se imparte vía online (e-terapias). Las e-terapias han mostrado resultados comparables a la terapia cognitivo conductual presencial, con tasas de remisión de hasta un 70% de los que habían completado el total de sesiones, aunque la adhesión al mismo resultaba baja.
Las terapias de alta densidad incluyen mayor número de sesiones, presenciales todas ellas y sujetas a evaluaciones estrictas. En una revisión Cochrane se concluye una Odds ratio de 0,13 para el grupo de intervención frente al control (eficacia de 59% frente a 18%, respectivamente). Resulta más difícil extrapolar los resultados de las terapias cognitivo-conductuales en menores de 7 años, no incluidos en la mayoría de estos estudios.
El tratamiento farmacológico se ha demostrado eficaz, principalmente a corto plazo. Las benzodiacepinas, aunque seguras y eficaces no se recomiendan debido principalmente a la dependencia. Aunque los inhibidores de la recaptación de la serotonina han mostrado resultados positivos no se ha objetivado mejoría en comparación a la terapia cognitivo-conductual. También se contempla su uso en combinación con dicha terapia.
Se destaca la necesidad de estar sensibilizados ante una patología muy frecuente y muchas veces normalizada en la vida diaria de la población infantil y principalmente adolescente.
Gonzalo de la Fuente Echevarría
Pediatra de AP. CS Periurbana Norte. Salamanca