M.T. Alonso San Pablo, X. Calderón-Castrat
Servicio de Dermatología. Hospital Universitario de Salamanca
Resumen
En los últimos años, se han hecho grandes avances en el estudio de las anomalías vasculares, en un intento de unificar los criterios, tanto en la nomenclatura y clasificación, como en el abordaje terapéutico. Las anomalías vasculares están constituidas por dos grandes grupos bien diferenciados: los tumores vasculares y las malformaciones vasculares. Los hemangiomas infantiles representan el grupo más importante de los tumores vasculares y es el tumor benigno más frecuente en la infancia. Aunque la mayoría presentan un curso indolente y una resolución espontánea, es importante tener en cuenta que algunos hemangiomas pueden conllevar, fundamentalmente por su localización, un riesgo vital para el paciente, así como complicaciones médicas y estéticas. En el grupo de las malformaciones vasculares, la Mancha en Vino de Oporto es la más frecuente. A diferencia de los hemangiomas, las malformaciones vasculares no involucionan, persistiendo durante toda la vida. Es fundamental, por tanto, para el pediatra, diferenciar entre ambos grupos para poder establecer un diagnóstico correcto y ofrecer un abordaje terapéutico adecuado en cada paciente.
Pediatr Integral 2016; XX (3): 159-168