Durante la pandemia COVID-19, iniciada en marzo de 2020, se ha percibido un aumento de hospitalizaciones de niños con síndrome multisistémico inflamatorio pediátrico asociado temporalmente con SARS-CoV-2 (PIMS-TS).
En esta serie de casos (58 niños de 8 hospitales de Inglaterra ingresados entre el 23 de marzo y 16 de mayo de 2020) se compararon las características clínicas y de laboratorio con pacientes con enfermedad de Kawasaki y síndrome de shock tóxico ingresados en hospitales europeos y estadounidenses entre 2002 y 2019.
De los 58 pacientes (media de edad fue de 9 años), 33 niñas (57%) se identificaron que cumplían criterios para PIMS-TS. La PCR para SARS-COV-2 fue positiva en 15 de 58 pacientes (26%), y la IgG positiva SARS-COV-2 en 40/46 (87%). En total, 45/58 pacientes (78%) tenían evidencia de infección por Covid19. De forma generalizada, los niños presentaron fiebre y síntomas inespecíficos, como vómitos (26/58, 45%), dolor abdominal (31/58, 53%) y diarrea (30/58, 52%). La erupción cutánea estuvo presente en 30 de 58 (52%), y la hiperemia conjuntival en 26/58 (45%). Los parámetros de laboratorio que se elevaron con más frecuencia fueron la PCR y ferritina. De los 58 niños, 29 desarrollaron shock (con evidencia analítica de disfunción miocárdica) y requirieron expansión de volumen y soporte ionotrópico. Ocho pacientes (14%) desarrollaron dilatación coronaria o aneurisma.
El síndrome inflamatorio mostró diferencias en las características clínicas y de laboratorio, incluida la edad avanzada (media de 9 años versus 2,7 años), mayor elevación de marcadores inflamatorios como la proteína C reactiva (mediana 229 mg/L frente a 67 mg/L).
Concluyen que en este caso la comparación con pacientes con síndrome de shock tóxico, enfermedad de Kawasaki y shock secundario a ésta sugiere que este trastorno difiere de estas otras entidades inflamatorias en pacientes pediátricos.
Marta García Lorente
Residente de Pediatría. Hospital Universitario de Salamanca