El objetivo del estudio es valorar la relación entre la contaminación atmosférica y los problemas respiratorios en la infancia. La contaminación medioambiental supone una concentración excesiva en la atmósfera de dióxido de nitrógeno (NO2), monóxido de carbono (CO), dióxido de azufre (SO2), hidrocarburos como el benceno, y las partículas en suspensión de tamaño inferior a 2,5 μ y 10 μ, entre otros. La polución en las grandes ciudades, como Madrid, es noticia habitual y los organismos internacionales emiten informes y alertas sobre la repercusión en la salud.
Se utilizó como variable dependiente los ingresos hospitalarios pediátricos en general y aquellos por patología respiratoria (neumonía, crisis asmática, bronquiolitis). El estudio se llevó a cabo en un Hospital del centro de Madrid (Hospital Infantil del Niño Jesús) durante los años 2012-2017. Como variables independientes se estudiaron los valores promedio de contaminantes ambientales en Madrid. Se comparó el promedio de ingresos cuando los valores de dióxido de nitrógeno eran superiores e inferiores a 40 µg/m3.
El 50,68 % de los ingresos fueron por problemas respiratorios. La edad media fue de 2,84 años para los ingresos en general y 2,38 años en ingresos por patología respiratoria. Se encontró una correlación entre los niveles de NO2, CO, benceno y los ingresos totales y por procesos respiratorios con un valor de p< 0.0001. Igualmente se observó una correlación negativa con la temperatura (bajas temperaturas aumentan los ingresos probablemente por la predisposición a infecciones víricas).
Los resultados de este estudio confirman los niveles excesivos de NO2, CO y benceno registrados en las estaciones de medición situadas en la ciudad y la relación existente entre los ingresos pediátricos y los niveles de contaminación atmosférica en la ciudad. De tal manera que los picos de contaminación aumentan los ingresos hospitalarios generales y respiratorios, y dichos ingresos disminuyen cuando los niveles de NO2 descienden. La mejora de la calidad del aire evitaría ingresos y los pediatras deberían implicarse en esta tarea.
Ángel Martín Ruano
Pediatra de EAP. CS Miguel Armijo. Salamanca
Profesor Asociado. Facultad Medicina. Universidad de Salamanca
