Estudio de cohortes retrospectivo con el objetivo de cuantificar la repercusión de la pandemia en la aparición de nuevos casos de DM1 y de cetoacidosis diabética. Se analizan los datos obtenidos de los ingresos en una unidad de cuidados intensivos pediátricos por cetoacidosis, así como en el Registro Finlandés de Diabetes Pediátrico y se compara con el registro de los 4 años previos.
La incidencia de ingresos de casos nuevos se elevó de 2.89 por 100.000 a 9.35 por 100.000, con una razón de tasa de incidencia de 3.24 (IC 95% 1.80-5.83). En la pandemia el 55% de los niños que ingresaron en la UCIP tenían síntomas desde 3 semanas antes, comparado con el 20% de los niños durante los 4 años previos. El 35% de los niños fueron testados con PCR para SARS-CoV-2 y todos resultaron negativos. Se realizaron serologías a SARS-CoV-2 con resultado negativo en el 97%. Comparativamente, durante la pandemia la incidencia de DM1 se incrementó desde 38.7/100.000 niños a 56/100.000 con una razón de tasa de incidencia de 1.45 (1.13 -1.86).

Aunque el aumento de casos de ingreso de debuts diabéticos en UCIP podría estar influido por el retraso diagnóstico por la pandemia, los análisis muestran un incremento real de incidencia poblacional. Sin embargo, no se puede constatar un aumento atribuible a la propia infección por SARS-CoV-2.
Gonzalo de la Fuente Echevarría
Pediatra de AP. CS Ciudad Rodrigo. Salamanca