La fiebre sin foco (FSF) en el recién nacido (RN) supone un motivo de consulta frecuente en los servicios de urgencias pediátricas (SUP). La mayoría de casos se deben a cuadros infecciosos benignos. Sin embargo, los menores de 3 meses pueden presentar una infección bacteriana grave (IBG) con más facilidad sobre todo debido a la inmadurez de su sistema inmune. Según la literatura el porcentaje de IBG en los pacientes menores de 1 mes con FSF aún sigue siendo significativo (5-10%).
El objetivo principal de este estudio fue determinar la utilidad del análisis de LCR (cultivo bacteriano e identificación de enterovirus y virus del grupo herpes mediante la técnica de reacción en cadena de la polimerasa [PCR]) y del urocultivo, para confirmar la etiología de los casos de FSF en RN así como relacionar la positividad de dichos cultivos con factores de riesgo de infección asociados a sepsis neonatal. Se trata de un estudio descriptivo y retrospectivo, en el que se incluyen todos los pacientes menores de 1 mes de edad atendidos en un SUP de tercer nivel, que consultaron por FSF entre enero de 2011 y diciembre de 2013. La obtención del LCR se efectuó a través de la técnica de punción lumbar, y la de orina mediante sondaje uretral o chorro medio de micción espontánea, como métodos estériles de recogida.
En total se incluyeron 146 casos, 88 varones (60,3%) y 58 mujeres (39,7%). La media de edad de los pacientes fue de 17,09 días. El 13,6%, presentó un urocultivo positivo, siendo Escherichia coli el microorganismo más frecuente (75%). El 28,8% presentó un LCR positivo, lo que supone el 95,2% de los casos de infecciones por enterovirus, sin aislarse ningún agente bacteriano. Este estudio además encontró una relación estadísticamente significativa (p<0,002) entre los pacientes que presentaron valores más elevados de temperatura y los cultivos de LCR positivos para enterovirus, así como entre los que presentaron mayores recuentos de leucocitos en sangre con cultivo de orina y LCR patológicos (p<0,001 y p=0,019, respectivamente). Sin embargo, no se encontró ninguna asociación significativa con el estado general o los cambios de coloración cutánea del RN.
Por tanto, este estudio concluye que la indicación del urocultivo y cultivo de LCR como parte del estudio de la FSF del RN no deben basarse sólo en los hallazgos obtenidos de la anamnesis y la exploración física ya que la fiebre elevada puede ser un signo de infección por enterovirus, por lo que, independientemente de la edad o la normalidad de los hallazgos de la analítica, estaría justificada la realización de una punción lumbar en estos casos para descartar dicha posibilidad diagnóstica, evitando así indicaciones injustificadas de antibioterapia.
Eva Navia Rodilla Rojo
Médico Interno Residente de Pediatría. Hospital Universitario de Salamanca