Willer BL, Mpody C, Aepli S, et al. Language of Caregiver and Pediatric Day-of-Surgery Cancellations. J Pediatr. 2025 Mar 19;281:114547
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/40118247/
Desde atención primaria o especializada, la cancelación quirúrgica en el mismo día supone un reto organizativo, económico y asistencial. Este estudio retrospectivo realizado en Estados Unidos analiza el impacto del idioma del cuidador sobre la probabilidad de cancelación en cirugía ambulatoria pediátrica, con más de 173.000 niños incluidos. Aunque los datos proceden del ámbito norteamericano, sus conclusiones son perfectamente aplicables a contextos como el nuestro, donde también existe una creciente diversidad lingüística y cultural.
Los autores observaron que los niños con cuidadores que no hablaban inglés presentaban una tasa de cancelación significativamente mayor (5,2%) en comparación con aquellos cuyos cuidadores eran angloparlantes (3,7%). Esta diferencia se mantuvo tanto en barrios con menos recursos como en aquellos más favorecidos, lo que indica que vivir en un entorno socioeconómico ventajoso no protege frente a las barreras de comunicación.
Uno de los hallazgos más llamativos fue el doble de cancelaciones por incumplimiento del ayuno preoperatorio en niños de familias no angloparlantes (22% frente a 11%). Esto apunta a dificultades en la comprensión de las instrucciones dadas antes de la cirugía, probablemente por falta de materiales traducidos, baja alfabetización sanitaria o ausencia de intérpretes cualificados. En este registro estadounidense, en cuanto a los idiomas más frecuentes hablados por los cuidadores, los que hablaban somalí tuvieron la tasa más alta de cancelaciones (7,2%), seguidos por los que hablaban nepalí (4,9%), español (4,4%) y árabe (3,9%).
Este trabajo refuerza la necesidad de adaptar la comunicación preoperatoria a las características lingüísticas y culturales de cada familia. La entrega de instrucciones claras, en varios formatos (escritas, telefónicas, audiovisuales) y en el idioma preferido del cuidador, es una medida sencilla que puede reducir cancelaciones y mejorar la equidad en el acceso quirúrgico pediátrico.
En el contexto español, donde la población pediátrica atendida es cada vez más diversa, estos resultados invitan a revisar nuestros circuitos de información preoperatoria y a fortalecer el uso sistemático de traducciones, intérpretes o apoyos visuales. Una intervención tan sencilla como verificar que la familia ha comprendido correctamente el ayuno puede tener un impacto directo en la calidad y la eficiencia de la atención.