Las III Jornadas de Vacunas, del VACAP de la Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y Atención Primaria (SEPEAP) se celebraron el 19 de Febrero, con éxito de asistencia y por el excelente programa y organización, en el Hospital General Universitario Gregorio Marañón de Madrid.
“Las vacunas son el medicamento más seguro y eficaz que existe y la mejor estrategia en salud pública. Estos tratamientos han ayudado a evitar millones de muertes en todo el mundo, ahorran recursos sanitarios y han contribuido a eliminar numerosas enfermedades, entre ellas la viruela, esperando que se pueda erradicar próximamente también la poliomielitis“, se señaló en la inauguración de estas Jornadas.
En este encuentro, que reunió a unos 200 profesionales de todo el país (pediatras, preventivistas, epidemiólogos , médicos generales y de Familia, Farmacéuticos, enfermeras…), ha servido “para dar a conocer las últimas actualizaciones en vacunas, caso de la incorporación de la vacunación contra la gripe y tosferina en las embarazadas, que a partir de enero se comenzará a aplicar, en el caso de la tosferina en las diferentes Comunidades, atendiendo al repunte de casos de esta patología en niños de menos de un año, o la inclusión también en el 2016 de la vacuna frente al neumococo en el calendario gratuito, la importancia de la vacunación antigripal, al papilomavirus con sus beneficios esperados e inesperados, la pronta aplicación de la nanovalente en varones y mujeres, la liberación de la vacuna frente al meningococo B, así como la importancia de la enfermería en la los programas de vacunación” fueron los temas que los diferentes profesionales ,trasmitieron con un rigor científico el interés de nuestros asistentes que con un espíritu crítico, dieron un ambiente agradable e interesante”
En un contexto actual de mundo globalizado, con diferencias de pensamiento, entornos y economía, en una Europa cambiante, donde el número de vacunas disponibles se incrementa día a día, las decisiones sobre las políticas en inmunización deberían ser idealmente estandarizadas, transparentes y basadas en la evidencia y en los recursos y contemplando a la sociedad como actriz en la toma final de decisiones. La creación de un Comité Asesor de Vacunas español, puede ser una estrategia idónea de participación de las sociedades científicas interesadas en la vacunación. Un órgano de este tipo podría ser clave para tener un programa de vacunación común que puedan compartir de manera voluntaria todas las CCAA, sin tener que renunciar a sus competencias, y al que se adhieran las sociedades científicas, dada la importancia capital de los profesionales sanitarios en la prescripción, consejo y administración de vacunas.
Nuestra situación actual en España, desencuentro de la vacuna de la varicela y otras, una creciente situación crítica respecto a las vacunas tanto en el público general como en los profesionales sanitarios, recalcan la necesidad de un paso hacia adelante en nuevas formas de asesoramiento y toma de decisiones . Si no logramos mantener la confianza y la adherencia de los ciudadanos necesaria para hacer factible el éxito de un programa de inmunización sin motivación política y liderazgo firme y científico, las vacunas habrán perdido definitivamente su inocencia y los verdaderos perdedores habrán sido nuestros niños, nuestros mayores y los más débiles.
En tiempos de crisis las políticas de vacunación tienen que considerar la inclusión en los calendarios vacunales de las vacunas más coste efectivo y aumentar los recursos para conseguir vacunar a las poblaciones excluidas.
Porque las vacunas salvan vidas, son coste efectivas en muchos casos y con la vacunación sostenida se ha conseguido eliminar algunas enfermedades y erradicar otras, los sanitarios estamos obligados a promover su uso y a resolver o clarificar con rapidez las controversias existentes en la actualidad. Es responsabilidad de las sociedades científicas y de las autoridades sanitarias sentar las bases para que la población esté correctamente informada sobre la eficacia y seguridad de las vacunas.
Son momentos convulsos en la sanidad española, en el ojo del huracán del British Medical Journal, una de las revistas médicas más prestigiosas del mundo. No sólo tiene espasmos epilépticos el sistema de financiación de nuestro país, cuestionando los principios tan manidos, pero no menos válidos, de equidad, gratuidad en lo fundamental y calidad. Nuestros gobernantes imponen alternativas sin mostrar de forma clara la viabilidad de su propuesta. El calendario vacunal propuesto por el actual ministerio es una marcha atrás respecto a la evidencia científica, aunque pueda suponer un intermedio de adaptación a la crisis actual que atravesamos. Las sociedades científicas, se han echado encima. Entendemos mal los procesos colaborativos entre entidades entre las que pudiendo existir intereses personales diferentes, puede llegarse a trabajar en una línea común manteniendo la ética.
La Medicina, precisa de más Tecnología y más Tiernología (la ciencia del afecto llevada a la consulta para poder ofrecer al y con el paciente el mejor consejo o actuación a la luz de la evidencia científica y precedida de la ejemplaridad del profesional en la medida de lo posible). Esto, las personas, nuestros pacientes, lo entienden muy bien y lo expresan en sus preguntas: Y usted, doctor@, ¿le aplicaría esto a su madre (su hijo@)? ¿Le pondría esta vacuna? Mantengamos esta credibilidad en las vacunas, dejemos que los científicos hagan su trabajo, dejemos que los jueces hagan su trabajo y sería deseable crear recursos intermedios como los fondos de compensación por posibles daños por vacunas, dejemos que sigan siendo uno de los pilares de la Medicina en los que se CREE.
Por último, insistir en los beneficios de pertenecer al Grupo de vacunas como el VACAP, un gran equipo de profesionales que está trabajando para conseguir lo mejor de sí: ciencia basada en la evidencia, al alcance de los profesionales y del público.
Es evidente por tanto, la necesidad de actuar ante la inconsistencia antivacunadora, con serenidad, sosiego, pero también con contundencia. Está en juego la salud de nuestros ciudadanos. Y es que, no solo se trata de ciencia, sino también de conciencia.
Para finalizar quiero agradecer a todos mis compañeros y compañeras del VACAP por su disposición, paciencia y apoyo así como su rigor científico y el alto grado de comunicación, a los alumnos que nos alegramos por su interés, que nos hace seguir dinamizando estos proyectos de Formación Continuada, al Hospital Gregorio Marañón por acogernos en tan ilustre Institución, a las Autoridades por estar y trasmitir su interés por la Prevención y el quehacer de los profesionales sanitarios, a la Agencia Pacifico por su estimada colaboración. No quiero olvidarme de nuestro presidente que con su presencia y estimulo hizo que la jornada fuera más entrañable. Por último trasmitiros no solo mi cariño y disposición para todos sino también un extraño virus que ocasiona: tolerancia, comprensión, inmunidad a la frustración y tenacidad.
Espero sepáis perdonar mis errores.
Dr. Jesús García Pérez, coordinador de las jornadas.