Estudio transversal realizado en 85 colegios de primaria para estudiar la asociación entre consumo de comida para llevar con marcadores de riesgo de enfermedad coronaria, diabetes tipo 2 y marcadores de riesgo de obesidad. Se basa en un estudio observacional en niños entre 9-10 años. Se recluta una muestra de 2529 niños, de los cuales se obtiene un registro completo en 1948 niños.
Se hace una encuesta nutricional en la que se incluye el consumo de comida para llevar, dividiéndola en 4 posibilidades (nunca, < de 1 por semana, 1 por semana y > de 1 por semana). Se hacen mediciones antropométricas, impedanciometría, tensión arterial y analítica completa.
De los 1948 niños, el 26% nunca había consumido comida para llevar, mientras el 46% lo tomaba < de 1/sem, el 28% igual o > 1/sem. Es mayor el consumo en varones, así como en los de menor nivel socioeconómico.
Comparando los grupos de nunca y los de >1/sem se muestran mayores niveles en este último grupo de índice de grasa corporal (2.01 vs 2.11), suma de pliegues cutáneos (39.8 mm vs 42.3), colesterol total (4.44 mmol/L vs 4.53), LDL colesterol (2.58 mmol/L vs 2.68), insulina (7.17 mmol/L vs 7.31).
Comparando las encuestas dietéticas de ambos grupos también se registra en el grupo de consumo de comida para llevar >1/sem un mayor consumo de calorías totales (1723 Kcal vs 1950), porcentaje de grasa en la dieta (33.5% vs 34.8), grasas saturadas (12.2% vs 13.1), disminuyendo el aporte de vit C (83.7 mg vs 76.2), hierro (8.9 mg vs 8.6), calcio (748 mg vs 681) y acido fólico (207 g vs 195).
Estos resultados requieren estudios prospectivos a largo plazo para evaluar el riesgo real y progresivo del consumo de comida para llevar o lo que podríamos englobar en malos hábitos de alimentación.
Gonzalo de la Fuente Echevarría
Pediatra de AP. CS Ciudad Rodrigo. Salamanca
