Purba AK, Thomson RM, Henery PM, Pearce A, Henderson M, Katikireddi SV. Social media use and health risk behaviours in young people: systematic review and meta-analysis. BMJ. 2023 Nov 29;383:e073552
https://www.bmj.com/content/383/bmj-2022-073552
Las redes sociales han revolucionado el panorama de la comunicación: aproximadamente 139 millones de adolescentes (definidos aquí como jóvenes de 10 a 19 años) usaron Instagram y 120,2 millones usaron Facebook en todo el mundo en 2022. Aunque están reconocidas por la Organización Mundial de la Salud como un medio poderoso para promover la salud y a pesar de sus posibles beneficios, es posible que se produzcan efectos nocivos sobre las conductas de riesgo para la salud de los adolescentes. La adolescencia es un período que denota la adopción de comportamientos que duran toda la vida; por lo tanto, las consecuencias para la salud son potencialmente inmediatas y de por vida.
Las revisiones existentes se centran en poblaciones universitarias y, por lo tanto, no son representativas de todos los adolescentes. Investigaciones anteriores sugieren que el efecto de las redes sociales en la salud mental de los adolescentes presenta diferencias de edad y sexo, en las que existen mayores efectos negativos para las mujeres y los adolescentes más jóvenes (en comparación con varones y adolescentes mayores). Sin embargo, estas posibles diferencias aún deben examinarse en relación con las conductas de riesgo para la salud.
El objetivo de este estudio fue revisar sistemáticamente la evidencia sobre el uso de las redes sociales y las conductas de riesgo para la salud de los adolescentes utilizando cinco objetivos:
En primer lugar, explorar cómo se mide el uso de las redes sociales en los estudios.
En segundo lugar, investigar la asociación entre el tiempo pasado en las redes sociales y la frecuencia de uso con las conductas de riesgo.
En tercer lugar, explorar la asociación entre la exposición al contenido de conductas de riesgo para la salud mostrado en las redes sociales y las conductas de riesgo.
En cuarto lugar, investigar si alguna relación difiere según la plataforma/categoría de redes sociales utilizada, la edad, el sexo, la posición socioeconómica y el estado de desarrollo del entorno de estudio.
Finalmente, evaluar la certeza de la evidencia mediante la clasificación GRADE (Grado de recomendación, valoración, desarrollo y evaluación).
Se trata de una revisión sistemática y metanálisis que utiliza como fuentes de datos EMBASE, Medline, APA PsycINFO, SocINDEX, CINAHL, SSRN, SocArXic, PsyArXiv, medRxiv y Google Scholar (1 de enero de 1997 al 6 de junio de 2022).
Las conductas de riesgo para la salud se definieron como el uso de alcohol, drogas, tabaco, sistemas electrónicos de administración de nicotina, conductas dietéticas poco saludables, actividad física inadecuada, juego y conductas antisociales, de riesgo sexual y múltiples conductas de riesgo. Los estudios incluidos informaron sobre el tiempo invertido, frecuencia de uso, exposición a contenido de conductas de riesgo para la salud u otras actividades de las redes sociales.
De 17.077 estudios seleccionados, se incluyeron 126 (73 incluidos en los metanálisis). La muestra final incluyó 1.431.534 adolescentes (edad media 15,0 años). La síntesis sin metanálisis indicó asociaciones perjudiciales entre las redes sociales y todas las conductas de riesgo para la salud en la mayoría de los estudios incluidos, excepto la actividad física inadecuada, donde se informaron asociaciones beneficiosas en el 63,6% de los estudios. El uso frecuente (vs. infrecuente) de las redes sociales se asoció con un mayor consumo de alcohol, consumo de drogas, consumo de tabaco, conductas sexuales de riesgo, conducta antisocial, múltiples conductas de riesgo y juego. La exposición a contenido que muestra conductas de riesgo para la salud en las redes sociales (vs. sin exposición) se asoció con mayores probabilidades de uso de sistemas electrónicos de administración de nicotina, conductas dietéticas poco saludables, y consumo de alcohol. Para el consumo de alcohol, se identificaron asociaciones más fuertes con la exposición al contenido generado por el usuario frente al contenido generado por el comerciante. En cuanto al tiempo pasado en las redes sociales, el uso durante al menos 2 horas por día (vs <2 horas) aumentó las probabilidades de consumo de alcohol. La certeza GRADE fue moderada para el comportamiento alimentario poco saludable, baja para el consumo de alcohol y muy baja para otros resultados investigados.
Esta revisión concluye que el uso de las redes sociales está asociado con conductas adversas de riesgo para la salud en los jóvenes, pero se necesita más investigación de alta calidad para establecer la causalidad, comprender los efectos sobre las desigualdades en salud y determinar qué aspectos de las redes sociales son más dañinos.