Pan X, Liu Y, Luo J, et al. The efficacy and safety of azithromycin in treatment for childhood asthma: a systematic review and meta-analysis. Pediatr Pulmonol. 2021 Dec 4. doi:10.1002/ppul.25783
https://onlinelibrary.wiley.com/doi/10.1002/ppul.25783
La azitromicina, un antibiótico de la familia de los macrólidos y ya empleado para otras terapias respiratorias por su efecto inmunomodulador, es una herramienta que se utiliza cada vez más como estrategia terapéutica en el asma infantil. El objetivo de la siguiente revisión sistemática fue evaluar la eficacia y seguridad de este fármaco en el control crónico.
Se realizaron búsquedas en siete bases de datos para incluir ensayos clínicos aleatorizados. Cuatro revisores examinaron de forma independiente todos los registros. Se agruparon los cocientes de riesgo (OR) con un intervalo de confianza del 95% para resultados dicotómicos y diferencia de medias (DM) con mismo intervalo para los resultados continuos.
Se incluyeron finalmente 17 estudios. La prevalencia de exacerbaciones en el grupo azitromicina + budesonida + beta2 agonista fue menor que en el grupo budesonida + beta2 agonista (4-13%- frente a 19-63%-, p<0.05) en niños con edades comprendidas entre 6 y 14 años con asma crónica persistente. La azitromicina en conjunto con el tratamiento clásico para el asma podría mejorar la puntuación en la espirometría (DM= 2.97; IC95% 2.39-3.54) en comparación con el tratamiento convencional únicamente.
Asimismo, este macrólido más fármacos antiasmáticos podrían mejorar el porcentaje del valor previsto del volumen espiratorio forzado postratamiento en 1 segundo/capacidad vital forzada (DM = 10.24, IC95% 6.44-14.03%) y el porcentaje del valor previsto del flujo espiratorio pico postratamiento (DM = 7%, IC95% 2.53-11.47%) en comparación con los fármacos antiasmáticos solos en niños con asma crónica persistente.
De esta manera se podría concluir que la azitromicina puede ser beneficiosa para mejorar algunos síntomas clínicos y la función pulmonar en pacientes colaboradores mayores de 6 años con asma crónico persistente, aunque se requieren más estudios que confirmen estos hallazgos.